«El modelo de negocio de la gama completa combina criterios de rentabilidad económica con valores de responsabilidad social«
Matilde Sánchez Reyes es la presidenta de la Federación de Distribuidores Farmacéuticos (FEDIFAR) desde 2021, la patronal que agrupa a todas las empresas de distribución farmacéutica de gama completa que operan en España. Licenciada en Farmacia y doctora por la Universidad de Sevilla, complementó su formación con un MBA del Instituto de Empresa. Desde 1998, es titular de una oficina de farmacia en Sevilla. Su compromiso con la profesión farmacéutica se refleja en su participación activa en diversas instituciones: es secretaria del consejo rector de Bidafarma, de la Sociedad Europea de Cooperativas Farmacéuticas (SECOF) y Acofarma, además de consejera en Unycop y Cedifa. Su trayectoria y experiencia la han convertido en una firme defensora del modelo actual de farmacia y en una voz autorizada dentro del sector.
El pasado mes de abril fue reelegida como presidenta de la Federación de Distribuidores Farmacéuticos (FEDIFAR), cargo que lleva ostentando desde 2021. ¿Cuál es su balance de estos años?
En primer lugar, agradezco a todos los asociados el haber renovado su confianza en mí para presidir la patronal una nueva legislatura. Respecto al balance de estos tres años, pienso que ha sido positivo. A nivel institucional, la patronal ha trabajado intensamente representando y siendo el interlocutor del sector ante las distintas administraciones públicas, instituciones y organizaciones, al tiempo que ha defendido en todo momento los intereses y objetivos de las empresas asociadas.
La distribución farmacéutica de gama completa es una actividad esencial e insustituible
Queda mucho trabajo por hacer y, en este camino, tenemos en el Plan Estratégico 2024-2027, una guía para desarrollar acciones y proyectos en diferentes áreas. Entre nuestros objetivos está, por ejemplo, que las nuevas normativas recojan las reivindicaciones del sector; poner a disposición de las administraciones los recursos con los que contamos para mitigar los efectos de los problemas de escasez de medicamentos; facilitar que los asociados cumplan con la nueva normativa de residuos y envases; acordar el nuevo convenio colectivo del sector; o dar más visibilidad a la contribución de las empresas de gama completa al sistema sanitario y a la sociedad en general.
Defienden una distribución farmacéutica de gama completa. ¿Qué ventajas presenta frente a otros modelos? ¿Reciben los pacientes una mejor atención que en los países donde no está vigente?
Dentro de las líneas de actuación marcadas en el Plan Estratégico 2024-2027 que he comentado anteriormente, acabamos de presentar un estudio independiente, elaborado por la consultora Analistas Financieros Internacionales (AFI), que pone de manifiesto la aportación de valor de la distribución farmacéutica de gama completa en España y analiza el impacto de esta actividad en diferentes ámbitos de la sociedad: sanitario; económico; cohesión social y territorial; y medioambiental.
Desde el punto de vista sanitario, las conclusiones del informe destacan que solo la distribución de gama completa garantiza a todos los ciudadanos del país el acceso, a través de las oficinas de farmacia, a todos los medicamentos y productos farmacéuticos que necesitan en condiciones de equidad, calidad y máxima seguridad. Es uno de los activos que nos diferencia de otros modelos de distribución que no priorizan el componente sanitario frente al económico.
El modelo de negocio de la gama completa combina criterios de rentabilidad económica con valores de responsabilidad social, algo que tiene un gran impacto en la protección de la salud de los pacientes. En este sentido, si bien en otros países tienen una distribución de gama completa parecida a la española, la singularidad de nuestro modelo de distribución es el alto porcentaje de cooperativas de capital farmacéutico existente. Se trata de una forma de entender la distribución farmacéutica que tiene como prioridad garantizar, a través de la red capilar de farmacias, la equidad en el acceso a los medicamentos, algo que es compartido por todas las cooperativas, sociedades o multinacionales que operan en España.
¿Cree que sería posible un cambio de modelo en España a medio o largo plazo?
A priori, no lo creo. No sería lógico cambiar un modelo de distribución farmacéutica que funciona, que es beneficioso para los pacientes y el sistema sanitario, y que es muy bien valorado por las autoridades. La distribución farmacéutica de gama completa es una actividad esencial e insustituible, sin la cual los pacientes no tendrían un acceso equitativo al medicamento. Las administraciones sanitarias saben que somos un aliado que siempre ha mostrado su compromiso con la salud pública y con la sostenibilidad del sistema, por lo que no creo que entre en sus planes un cambio de modelo.
Por otro lado, en los últimos años el sector ha evolucionado hacia estructuras empresariales que cuentan con una mayor fortaleza para afrontar el futuro con garantías, algo que, en principio, dificultaría la entrada de otros operadores que podrían propiciar un cambio de modelo.
Se están revisando los marcos legislativos que regulan la actividad de la distribución farmacéutica en España y en Europa. ¿Cuáles son sus reivindicaciones?
A nivel legislativo tenemos por delante grandes desafíos, con dos procesos de revisión del marco normativo farmacéutico abiertos. En el ámbito europeo, la revisión de la Legislación Farmacéutica de la UE; en el contexto nacional, la reforma de la Ley de Garantías y Uso Racional de los Medicamentos y Productos Sanitarios. En ambos procedimientos, el objetivo de FEDIFAR es que las nuevas normativas recojan las reivindicaciones del sector y se aprovechen todas las potencialidades que la distribución farmacéutica de gama completa ofrece a los sistemas de salud, tanto en España como en Europa.
Respecto a las reivindicaciones que estamos haciendo llegar a autoridades, instituciones y formaciones políticas, destaca la petición de que se reconozca una actividad que es esencial para los sistemas sanitarios, la distribución farmacéutica de gama completa, y se diferencie, con los derechos y obligaciones que esta distinción lleva asociados, de la que realizan otros agentes que operan en el sector bajo la misma licencia pero que desarrollan una actividad totalmente diferente. Esto posibilitaría, por ejemplo, que se pudiese priorizar el suministro por parte de los laboratorios a los mayoristas farmacéuticos de gama completa en situaciones de escasez de medicamentos.
¿A qué otros retos se enfrenta la distribución actualmente? ¿Cuáles son sus prioridades?
La prioridad de los mayoristas farmacéuticos de gama completa es y siempre será garantizar el acceso de los ciudadanos, a través de las oficinas de farmacia, a los medicamentos que necesitan. Está en nuestro ADN desde hace más de un siglo. Por ese motivo, uno de los principales retos a los que nos enfrentamos las autoridades sanitarias y todos los que formamos parte de la cadena del medicamento es, precisamente, abordar los problemas de suministro.
¿Qué papel juega la distribución en los casos de desabastecimiento de fármacos? ¿Cómo puede contribuir a paliarlos?
Las incidencias en el suministro son un problema que afecta a nivel mundial y que tiene su origen en múltiples causas ajenas a la actividad de los asociados de FEDIFAR, por lo que no se encuentra en nuestras manos poder darles solución. Lo que sí podemos hacer es contribuir a paliar los impactos negativos que estas situaciones provocan en los ciudadanos, y para ello ponemos a disposición de las autoridades sanitarias tres activos: detección, información y gestión de la escasez.
Detección, para anticipar incidencias en el suministro semanas antes de que afecten al stock de los almacenes y tengan reflejo en las farmacias. Para ello, desarrollamos junto a la Aemps el Proyecto Artemis, que monitoriza e informa sobre los niveles de suministro de un listado de referencias elaborado por la Agencia (más de 400 presentaciones) para que las autoridades adopten las medidas que consideren oportunas en caso de que se produzcan incidencias. Asimismo, trabajamos en la elaboración de un protocolo estandarizado para informar proactivamente o responder a las solicitudes de información de la Aemps o las consejerías de Sanidad sobre posibles incidencias y alteraciones que se den en la cadena de suministro.
Una vez que se producen los problemas de abastecimiento, podemos jugar un papel fundamental en la gestión de la escasez, porque está contrastado que los mayoristas farmacéuticos de gama completa son los más capacitados para gestionar de forma equitativa y eficiente los stocks existentes y quienes pueden realizar una distribución responsable, evitando situaciones indeseables como acopios o suministros poco equitativos.
¿Fomenta la distribución la sostenibilidad? ¿Cómo?
Es evidente que distribuir más de 280.000 pedidos diarios de medicamentos y productos sanitarios que son necesarios para proteger la salud de los ciudadanos a las 22.222 oficinas de farmacia del país, recorriendo más de 300.000 kilómetros diarios, tiene un impacto medioambiental. Pero también está fuera de toda duda que la propia actividad que llevan a cabo los distribuidores farmacéuticos de gama completa es un elemento de sostenibilidad medioambiental, ya que este modelo reduce las operaciones de distribución al actuar como nexo entre laboratorios y oficinas de farmacia. Unas operaciones que se multiplicarían exponencialmente en el caso de que no existiese este tipo de distribución.
Aparte de esta aportación a la protección medioambiental, todas las empresas tienen planes para desarrollar acciones e inversiones encaminadas a reducir el impacto medioambiental: construcción y reforma de almacenes más sostenibles; fomento de la digitalización como herramienta para reducir el consumo de papel y cartón; electrificación, hasta donde permiten las nuevas tecnologías, de las flotas de vehículos; medición y compensación de la huella de carbono generada…
Sin duda, somos un sector que siempre ha estado muy comprometidos con la protección medioambiental. Un ejemplo es nuestra participación desde hace más de dos décadas en el sistema SIGRE, un proyecto pionero en Europa que se encarga de la correcta gestión medioambiental de los envases y restos de los medicamentos y en el que la logística inversa que desarrollan en él las empresas de los asociados a FEDIFAR evita anualmente la emisión de 1.400 toneladas de CO2 a la atmósfera.
¿Considera que el trabajo que realiza la distribución está lo suficientemente valorado por la Administración o el sistema sanitario?¿Cree que podrían ampliarse las funciones que desempeñan?
La distribución farmacéutica de gama completa es el agente menos conocido dentro del sector, pero esto no significa que la labor que desarrollamos no sea valorada por las autoridades sanitarias. Por ejemplo, durante la pandemia de la COVID-19 la sociedad visibilizó de manera palpable la labor que realizamos y las autoridades tomaron más conciencia de que resulta esencial para el sistema.
Respecto a ampliar las funciones que se realizan más allá de la distribución de medicamentos, las empresas ya han diversificado su actividad, bien para asumir los desajustes económicos derivados de los costes estructurales de la actividad principal, bien para dar respuesta a necesidades planteadas por las administraciones sanitarias, o bien por la demanda de nuevos servicios por parte de la farmacia. Sobre este particular, quiero subrayar que la oferta de nuevos servicios a la farmacia siempre deberá responder a sus necesidades y tendrá que contar con ella.
¿Cómo ve la distribución dentro de cinco años?
En cinco años pueden pasar muchas cosas: la sociedad evoluciona muy rápido, vivimos un momento de grandes cambios… Los asociados a FEDIFAR tienen capacidad para adaptarse a esos cambios y seguir mejorando para dar respuesta a las necesidades de las administraciones y los ciudadanos, incorporando a su día a día innovación y nuevas tecnologías; potenciando la digitalización y el uso de la inteligencia artificial; mejorando la eficiencia logística; fortaleciendo el compromiso medioambiental.
Pero, si hay algo de lo que estoy convencida, es de que dentro de cinco años las empresas de distribución farmacéutica de gama completa seguirán siendo una pieza fundamental en la cadena del medicamento y continuarán manteniendo su compromiso con la salud pública y la sostenibilidad del sistema, asegurando a los ciudadanos la igualdad de acceso a los medicamentos y productos sanitarios a través de las oficinas de farmacia.
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