Leticia Ortas Buil, vocal de alimentación del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Huesca
La Enfermedad por Reflujo Gastroesofágico (ERGE) es una patología que se produce cuando el ácido gástrico y otros contenidos del estómago fluyen de nuevo hacia el esófago, provocando lesiones en la mucosa y en las paredes de este conducto de diferente gravedad. Se trata de una enfermedad crónica cuyos síntomas son molestos y que, además, puede tener complicaciones graves si no se trata adecuadamente.
La causa de la Enfermedad por Reflujo Gastroesofágico es el mal funcionamiento del músculo esofágico inferior, que actúa como una válvula entre el esófago y el estómago. Cuando el esfínter no se cierra completamente, el contenido estomacal puede regresar al esófago, provocando la irritación y la inflamación. Además, la hernia de hiato, el aumento de la presión abdominal (por ejemplo, en personas obesas o embarazadas) y el mal funcionamiento de los músculos gastroesofágicos pueden contribuir a la aparición de la ERGE.
La fisiopatología de la ERGE se basa en una respuesta inflamatoria exagerada debido al daño en la mucosa del esófago causado por el contenido estomacal, que contiene un pH inferior al pH habitual del esófago. Específicamente, la exposición repetida al ácido gástrico conduce a un proceso inflamatorio crónico en la mucosa esofágica, que aumenta la producción y liberación de quimioquinas y citocinas, lo que a su vez induce una cascada inflamatoria en las células. Esto produce los síntomas característicos de la ERGE, como reflujo, acidez estomacal, dolor en el pecho, disfagia, dolor/ardor en la garganta, regurgitación de alimentos, náuseas y/o vómitos, entre otros.
Además de la inflamación, el reflujo continuo puede provocar cambios en la mucosa esofágica, especialmente en la unión gastroesofágica, como la metaplasia de las células escamosas de la mucosa del esófago, lo que conduce a un estado denominado esófago de Barrett. Este estado precanceroso se caracteriza por un mayor riesgo de desarrollar cáncer de esófago.
Clasificación
La ERGE puede variar en cuanto a su gravedad. En algunos casos, los síntomas son leves y temporales y no requieren tratamiento. Sin embargo, en otros, puede ser grave y provocar serias complicaciones e incluso ser potencialmente mortales si no se trata adecuadamente.
La clasificación de la ERGE se puede hacer en función de los síntomas y el alcance de las lesiones. Los tipos son:
- ERGE no erosiva.
- ERGE erosiva de grado A, B y C.
- ERGE complicada (estenosis, úlcera péptica, esófago de Barrett, broncoespasmo…).
Manifestaciones clínicas
Las complicaciones que más habitualmente se asocian a esta enfermedad son:
- Esofagitis.
- Úlcera esofágica.
- Estenosis esofágica.
- Adenocarcinoma.
- Hemorragia digestiva.
- Esófago de Barret.
Tratamiento y recomendaciones
El tratamiento para la ERGE se basa en un conjunto de medidas farmacológicas y no farmacológicas. Uno de los principales aspectos sobre el tratamiento de la enfermedad por reflujo gastroesofágico consiste en aliviar y reducir los síntomas, pero también es fundamental buscar el origen y tratar la causa del reflujo.
Entre las medidas principales se incluyen cambios en el estilo de vida, que es la primera recomendación que se debe de llevar a cabo. Es importante modificar ciertos hábitos para reducir los síntomas de esta enfermedad. Entre estos consejos se incluyen:
- Evitar comidas copiosas y abundantes, favoreciendo la ingesta de pequeñas colaciones durante el día.
- No acostarse justo después de una comida, esperar al menos dos horas.
- Evitar el consumo de alcohol y tabaco.
- Disminuir el consumo de cafeína.
- Reducir el sobrepeso y la obesidad.
- Elevar la cabecera de la cama durante el sueño.
En cuanto al tratamiento farmacológico, existen varios tipos de medicamentos que pueden ayudar a tratar el reflujo:
- Antiácidos, que alivian los síntomas al neutralizar el ácido en el estómago.
- Inhibidores de la bomba de protones (IBP), que reducen la cantidad de ácido que produce el estómago.
- Antagonistas de los receptores h2 (antihistamínicos), que bloquean los efectos de la histamina, una sustancia endógena que estimula la producción de ácido en el estómago.
- Procinéticos, que favorecen la movilidad de los alimentos a través del tubo digestivo para reducir el reflujo gastroesofágico.
En los casos más graves, cuando la sintomatología no mejora con cambios de hábitos ni con tratamiento farmacológico, es necesario recurrir a la cirugía.
Es importante destacar que el tratamiento de la ERGE debe ser personalizado y supervisado por un especialista en gastroenterología para poder adaptarlo a las necesidades individuales del paciente, y así lograr el control eficaz de los síntomas y mejorar su calidad de vida.
Cómo actuar desde la farmacia y criterios de derivación al médico
Las farmacias desempeñan un papel crucial en la educación y la prevención de la ERGE, así como en la identificación y derivación de pacientes a un médico si es necesario. Los farmacéuticos comunitarios pueden ofrecer consejos sobre cambios en el estilo de vida y medicamentos antiácidos o inhibidores de la bomba de protones. Además, pueden alentar a los afectados por esta patología que hablen con su médico si tienen síntomas persistentes o graves.
Desde la farmacia se debe derivar al médico en los siguientes casos:
- Pacientes que presenten síntomas de la ERGE y que no hayan mejorado con los cambios en el estilo de vida y los tratamientos farmacológicos después de varias semanas.
- Personas que presenten dolor en el pecho, sangrado en la boca o vómito con sangre, disfagia, pérdida de peso inexplicable, sangrado digestivo, muestras de sangre oculta en las heces, anemia y, especialmente, broncoespasmo.
- Personas de edad avanzada.
- Pacientes con antecedentes familiares de cáncer esofágico, para poder asegurar un diagnóstico correcto y evitar posibles complicaciones futuras.
Formar un equipo multidisciplinar entre farmacéuticos, médicos de atención primaria y especialistas en patologías digestivas nos ayudará a garantizar el mejor tratamiento para el paciente con ERGE y a mejorar su calidad de vida.
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